top of page

5 Maneras que el Evangelio nos Consuela en el Abuso Espiritual

El abuso espiritual es un arma de poder usada en diversos grupos religiosos y sectas. Con el mismo, se logra controlar a los miembros y asistentes con el objetivo de mantenerlos cautivos o en silencio por diversos motivos. Los líderes abusan espiritualmente cuando su autoridad es cuestionada, señalada o se está en desacuerdo. Tal vez hemos escuchado muchas historias de abuso espiritual en grupos ajenos al cristianismo. Lo triste es cuando este abuso lo encontramos en casa, en nuestras iglesias.

Básicamente hay dos tipos de abuso espiritual: agresivo y pasivo.

El tipo de abuso agresivo, tipo "bullying", el líder o líderes invaden tu espacio, levantan su voz, e incluso levantan amenazas de ponerte en tu lugar bajo su control. Muchas veces, citan pasajes bíblicos para ponerte bajo su sujeción y te recuerdan lo mucho que sufrirás al estar afuera de su autoridad.

Por el otro lado, el abuso pasivo tipo condescendiente o de menosprecio, se demuestra cuando el liderazgo se reúne contigo, "escuchan" tus preocupaciones, expresan aprecio por tu honesta retroalimentación y crean un ambiente "seguro". Sin embargo, cada una de tus palabras serán usadas en tu contra posteriormente.1

Al final, la víctima de abuso espiritual se ve envuelta en un velo de difamaciones, calumnias, menosprecio, chismorreo e indiferencia por otros líderes y hasta algunos miembros de la iglesia. Claramente esto conlleva a la víctima a reaccionar en una progresión de sorpresa, desilución, búsqueda de justicia y vindicación. Hay una gran desesperanza y terrible amargura, así como un desquebrajo en el cuerpo de Cristo.

Pero hay una gran esperanza en el evangelio, y esto trae un gran consuelo. Lo sabemos de primera mano mi familia y yo, ya que sufrimos este tipo de abuso. Amiga o amigo, espero que esta reflexión te sea de ayuda.

Durante nuestra experiencia de abuso espiritual, Dios en su misericordia puso a un grupo de personas que nos estuvieron recordando las grandes noticias del evangelio y nuestra identidad. Eran noticias que necesitábamos escuchar debido a que fuimos difamados, menospreciados y al querer limpiar nuestra reputación lo único que conseguíamos fue indiferencia. Esto nos llevó a almacenar amargura y buscar nuestra justicia bajo nuestras propias fuerzas. Tristemente, el mensaje de Cristo estaba en segundo plano en nuestras vidas.

Así que al recordar el mensaje del evangelio, encontramos 5 grandes elementos que trajeron un gran consuelo a nuestras vidas:

1. El evangelio nos ayuda a examinarnos a nosotros mismos. Encontramos que no teníamos que vernos a nosotros como las únicas víctimas. Tanto los líderes y nosotros fuimos, y seguimos siendo víctimas de nuestro propio pecado. Ambas partes caemos en manos de nuestras propias idolatrías de búsqueda de poder, control, afirmación, etc.

2. El evangelio nos permitió perdonar a aquellos que nos agraviaron. Y este perdón es una diaria decisión. Sabemos que el enemigo usará ese pasado doloroso para quitarnos nuestra esperanza y amargar nuestro corazón en contra de nuestros hermanos. El evangelio nos recuerda como nuestro Señor nos perdonó de todo lo que le hemos agraviado y nos llama amigos y hermanos.

3. El evangelio nos recuerda que no estamos solos. En Cristo tenemos un amigo que nos consuela y anima ya que El padeció un sufrimiento de proporciones cósmicas. En Cristo aprendemos a ver nuestro sufrimiento con una perspectiva eterna.

4. El evangelio nos muestra nuestra verdadera identidad. Ya no nos preocupamos por nuestra reputación a causa de difamaciones o chismes. En Cristo somos amados totalmente y nuestra reputación está guardada en El.

5. El evangelio nos libera. Cristo desafiaba a sus discípulos y a los fariseos a no solo amar a nuestros amigos, ¡sino a nuestros enemigos! Ese amor tan grande nos libera, y a través del Espíritu Santo obtenemos poder para poder amar a los demás, incluso a aquellos que nos lastiman. La verdadera libertad está en poder amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Amamos porque El nos amó primero.

¡Así que hay esperanza! Si estás atravezando una situación de abuso espiritual, recuerda que en el evangelio hay un gran consuelo y ayuda. Aférrate a las promesas que tenemos en el mensaje de Cristo.

1. Tomado de http://alansmithonline.com/signs-of-spiritual-abuse-part-1/

No tags yet.
bottom of page